Según han desvelado, La Agencia Internacional de Investigaciones Sobre el Cáncer (IARC) está analizando muy de cerca el aspartamo y podría incluirlo en la lista negra.
El diario ‘El País’ ha podido confirmar con fuentes del organismo que han llevado a cabo una investigación para evaluar el riesgo de este edulcorante de ser un potencial cancerígeno.
La información que ha trascendido es que el informe que ha elaborado este organismo, dependiente de la OMS, deja en muy mal lugar al aspartamo y parece que los resultados confirman que incrementa el riesgo de desarrollar cáncer.
Unos datos que no han sido confirmados ni desmentidos por la IARC todavía, pero han avanzado que durante el mes de julio harán público el informe.
«El Comité Mixto FAO/OMS de Expertos en Aditivos Alimentarios (JECFA) actualizará su evaluación de riesgos sobre el aspartamo, incluida la revisión de la ingesta diaria aceptable y la evaluación de la exposición alimentaria”, han confirmado al citado diario.
¿Qué es exactamente el aspartamo?
Si finalmente se confirman dichas filtraciones y el aspartamo es una sustancia cancerígena, podría suponer un fuerte varapalo a la industria alimentaria y obligar a cambiarla de lleno.
Y es que el aspartamo es un endulzante que se usa en multitud de productos desde hace décadas.
Este endulzante no nutritivo se emplea para fabricar artículos de repostería, bebidas light, helados, gelatinas…e incluso se utiliza en las pastas de dientes.
Es un sustituto del azúcar con muchas menos calorías, por lo que está presente en muchos productos ideados para hacer dietas.
De momento está considerado seguro para su ingesta «dentro de unos límites», pero esta afirmación podría cambiar en las próximas semanas tras la publicación del mencionado informe.
Esa afirmación de «seguridad» data del año 1981, pero la OMS ya señaló recientemente que los edulcorantes no son efectivos a largo plazo para controlar el peso y podrían aumentar el riesgo de desarrollar patologías graves como la diabetes tipo 2.