En el mes de julio han comenzado los trabajos de repoblación en los municipios de Fabero y Sancedo. Ambos proyectos serán llevados a cabo por Proyecto Arraigo, con la financiación del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico. La fase previa, de estudio y explicación de la metodología, comenzó el pasado mes de enero, en el que se analizaron las potencialidades de los municipios y de la comarca, así como de las necesidades de la misma.
El proyecto, que en Fabero lleva por nombre Entibando, término que hace honor a la naturaleza minera de la comarca, tiene por objetivo la atracción y arraigo de personas durante los próximos ocho meses. Además, cuenta con el apoyo de las corporaciones municipales, cuyos alcaldes, Mari Paz Martínez (Fabero) y Marcos Álvarez (Sancedo), y sus equipos de gobierno se han involucrado en el desarrollo del mismo.
«Hemos creado un centro de actividades económicas y un centro de dinamización demográfica», explica Martínez, para sacar a la luz las posibles viviendas disponibles. Para comenzar, se va a rehabilitar un apartamento que permita la llegada de nuevos pobladores en régimen de alquiler durante los primeros seis meses. También se prevé la licitación de un bar en un municipio cercano, así como de una panadería.
Ana Fernández, técnico de Proyecto Arraigo para la zona de Fabero y Sancedo, explica que «son zonas con alto potencial que podrían encajar en las perspectivas y proyectos de vida de algunos de los urbanitas que se interesan por cambiar la ciudad por el mundo rural». «El Proyecto Arraigo encaja perfectamente con la necesidad de repoblación de la zona que tras el cierre de las minas no ha hecho más que menguar en población», reflexiona.
La falta de oportunidades laborales y de servicios básicos han provocado que jóvenes y mayores hayan tenido que abandonar la zona. «Los colegios cada vez tienen menos alumnos, los centros de salud se quedan sin médicos y las empresas van echando el cierre». Por eso, el trabajo de Proyecto Arraigo tratará de que las personas que lleguen a los municipios de Sancedo y Fabero ayuden con nuevos negocios, niños, jóvenes y familias que permitan el mantenimiento de los servicios para la población.