
El Partido Animalista (PACMA) ha presentado una propuesta de modificación del Real Decreto 666/2023, que regula la distribución, prescripción, dispensación y uso de medicamentos veterinarios, dirigida a los ministerios de Agricultura, Sanidad y Presidencia. Según PACMA, este decreto, aprobado con el objetivo de adaptar la normativa española al Reglamento Europeo sobre medicamentos veterinarios, presenta inconsistencias con lo establecido en dicho Reglamento, lo que hace imprescindible una revisión urgente.
Este miércoles, el presidente de PACMA, Javier Luna, participó en una manifestación en Madrid en apoyo al sector veterinario.
Incongruencias con el Reglamento Europeo
El Reglamento Europeo obliga a los Estados miembros a recopilar datos sobre el uso de antibióticos en animales. España, a través del RD 666/2023, ha implementado esta medida mediante la obligatoriedad de registrar cada prescripción veterinaria en el sistema informático PRESVET. Sin embargo, PACMA critica que esta obligación se extienda a los animales de compañía, cuando el propio Reglamento Europeo los excluye de este requerimiento.
“La Unión Europea está preocupada por la resistencia a los antimicrobianos, un problema de salud mundial derivado del uso rutinario de antibióticos en la industria ganadera. Sin embargo, este abuso no se da en los animales de compañía, motivo por el cual el Reglamento no exige recopilar esta información en su caso”, argumenta el Partido Animalista.
Requisitos que ponen en peligro vidas animales
PACMA también denuncia la obligatoriedad establecida en el RD 666/2023 de realizar pruebas de identificación de patógenos y sensibilidad al antibiótico antes de administrar medicamentos categorizados como “restringidos” por la Agencia Europea de Medicamentos. Según el partido, estas pruebas son desproporcionadas y están costando la vida de animales.
“El Reglamento Europeo permite administrar el antibiótico que el veterinario considere necesario sin esperar a los resultados de estas pruebas, y no las exige cuando el medicamento está autorizado en la UE. La normativa española, en cambio, impone estas pruebas en todos los casos, lo cual es injustificado y perjudicial”, señala PACMA.
Obstáculos en el tratamiento de animales no identificados
Otra de las problemáticas generadas por el decreto es la exigencia de identificar a los animales y a sus responsables para administrar medicamentos sujetos a prescripción. Esto dificulta el tratamiento de animales sin identificación, como los gatos comunitarios o los animales abandonados. PACMA recalca que el Reglamento Europeo no establece esta condición, permitiendo el tratamiento de estos animales sin restricciones adicionales.
Reducción del IVA en servicios veterinarios
Además, PACMA subraya la necesidad de reducir el IVA aplicado a los servicios veterinarios, que actualmente se sitúa en un 21%. Proponen que se aplique un tipo superreducido del 4%, argumentando que gravar estos servicios como un lujo contradice el objetivo de proteger la sanidad animal. “Es una incoherencia aprobar normas que supuestamente buscan garantizar el más alto nivel de protección para los animales mientras se imponen barreras económicas que los hacen inaccesibles para muchas familias”, concluyen.
Con esta propuesta, PACMA busca adecuar la normativa española al marco europeo y garantizar un trato más justo y eficiente para los animales, tanto domésticos como abandonados.