Siempre se ha querido pensar que la Tuna actual proviene del medievo, y de un conjunto de individuos tan encontrados como los goliardos, juglares o trovadores.
Esto es una idea romántica que se ha ido transmitiendo a lo largo de los años, entre las sucesivas
generaciones de tunos españoles e hispanoamericanos. La imagen de un trovador cantando a su amada era equiparada a la del tuno en una ronda esperando que su enamorada abra la ventana
para regalarle unas canciones.
Actualmente, aunque investigaciones de diferentes autores, señalan que las Tunas como las conocemos hoy en día tienen su origen en las decimonónicas estudiantinas de carnaval que aparecen en gran cantidad a partir de la mitad de ese siglo, y aunque las figuras de los goliardos, juglares y trovadores, no estén directamente vinculadas con los tunos actuales, la confluencia entre música y universidad, deja atisbar ciertas relaciones históricas y socioculturales.
Ni que decir tiene que, universidad, escolares y música siempre han estado en consonancia. Algunos de
esos estudiantes que a partir del inicio de los “estudios generales” acudían a sus aulas, utilizaban en muchos casos la música, tanto para proveerse de un sustento necesario, como para rondar a su amada
A finales del siglo XX emerge la figura asociativa de las CUARENTUNAS, dando cabida en ella a multitud de antiguos tunos que echaban de menos a esos compañeros que durante su etapa universitaria habían convivido tan estrechamente y que con el pasar de los años eran muy difíciles de olvidar.
En España, la primera asociación de estas características se funda en Barcelona en el año 1977 por los antiguos componentes de la Tuna Universitaria de esta ciudad, denominándola Cuarentuna de Barcelona.
Este nombre fue dado por componentes de la Tuna Universitaria barcelonesa. El nombre se instituyó de una forma casual estando un día un grupo de antiguos tunos barceloneses en la plaza de la Universidad, y al pasar a su lado unas señoras una de ellas les dice «vosotros como vais a ser tunos, si sois ya unos cuarentones», a lo que le contestan diciendo «no señora, nosotros no somos tunos, somos cuarentunos».
Después de esta simpática respuesta, el nombre gustó, y así se nombró a ese grupo de antiguos tunos barceloneses. Decir también ese nombre complació a todos pues la mayoría de sus componentes tenían más de cuarenta años, e incluso alguno llevaba más de cuarenta de pertenencia a la Tuna
Posteriormente, fuera de España, se crearon otras asociaciones de estas características, como ocurrió en Holanda (Eindhoven, años 90), Portugal (Viana do Castelo, 2004) y México (DF y Oaxaca).
Con el paso del tiempo, y para dar cabida a todas estas asociaciones, el 20 de noviembre de 2010, se crea la Federación Internacional de Cuarentunas. Fueron veintiuna las asociaciones firmantes del documento fundacional, aunque con el paso de los años se han ido incorporando a la FIC diferentes asociaciones como miembros de pleno derecho. Actualmente hay 33 asociaciones que forman parte activa de la misma.
La Cuarentuna Universitaria de León se crea el 27 de marzo de 2017, como consecuencia de los actos organizados para celebrar el 40 aniversario de la fundación de la Tuna Universitaria de León, siendo aprobados sus estatutos por la Junta de Castilla y León, el 3 de abril de 2017. Sus integrantes fueron en su momento estudiantes de la ULE, o de otras universidades españolas, y actualmente son profesionales en activo y eméritos en diversos sectores: veterinarios, biólogos, abogados, economistas, médicos, enfermeros, ingenieros, etc.
En la actualidad pertenecen a esta asociación 68 componentes y en su ánimo está en continuar fomentando las actividades musicales y tradiciones de la Tuna, la formación musical de sus asociados, además del estudio y divulgación de la música y la cultura en general.
Autor: Fernando Castañon
