
La Junta de Castilla y León refuerza su compromiso con la profesionalización de la hostelería y la restauración con una inversión de 437.400 euros en la Escuela Internacional de Cocina de Valladolid, dependiente de la Cámara de Comercio e Industria. La consejera de Industria, Comercio y Empleo, Leticia García, acompañada del presidente de la Cámara, Víctor Caramanzana, visitó hoy el centro donde se imparten varios cursos del programa de formación ocupacional para desempleados.
En total, son seis cursos con más de 3.500 horas de formación práctica y teórica, que permitirán la cualificación de 80 trabajadores, la mayoría en situación de desempleo. Los alumnos obtendrán certificados en áreas clave como servicios de restaurante, operaciones de pisos en alojamientos, dirección y producción en cocina, panadería, bollería, pastelería y confitería.
El curso visitado por la consejera cuenta con 1.110 horas de formación y un presupuesto de 142.650 euros. En él participan nueve alumnos, dos de los cuales ya se han incorporado al mercado laboral, lo que demuestra la eficacia de estas iniciativas como herramienta de inserción directa en el empleo.
Durante su intervención, García subrayó que la formación es uno de los pilares de las políticas activas de empleo de la Junta: “Profesionalizar la hostelería es la mejor forma de darle valor y garantizar empleos estables y de calidad”, afirmó. También destacó la importancia de la colaboración con la Cámara de Valladolid, que ha permitido en el periodo 2024/2025 la cualificación de más de 140 trabajadores con un presupuesto de 880.000 euros.
El presidente de la Cámara, Víctor Caramanzana, valoró la alianza como “estratégica para la hostelería y el turismo, con impacto real en la inserción laboral y el crecimiento del sector”.
Además de esta iniciativa, el Servicio Público de Empleo de Castilla y León (Ecyl) financia un centenar de acciones formativas en hostelería y restauración, con el objetivo de formar a más de 1.600 trabajadores en toda la Comunidad a lo largo de este ejercicio.
Estas actuaciones representan una clara apuesta por la profesionalización, la innovación y la mejora de la empleabilidad en un sector clave para la economía regional.