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La presidenta de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD), María Jesús Lafuente, acompañada por la Comisaria de Aguas, Diana Martín, el subdelegado del Gobierno en León, Faustino Sánchez, y el alcalde de Hospital de Órbigo, Enrique Busto, ha participado en la plantación de un centenar de árboles de ribera procedentes de los viveros del Organismo, junto a los alumnos del CRA de Hospital de Órbigo (León). Una actividad que se ha llevado a cabo en el entorno del río y que está enmarcada en la actuación desarrollada por la Confederación en las inmediaciones de la localidad para aumentar la laminación del cauce en épocas de avenidas y favorecer un correcto desarrollo de la vegetación de ribera.
Estos trabajos de mejora de la dinámica fluvial del río cuentan con un presupuesto de 250.000 euros y un plazo de ejecución de tres meses.
Lafuente ha charlado con los escolares a los que ha explicado la labor que desarrolla la CHD como Organismo encargado de la gestión de las aguas en la cuenca del Duero, así como la importancia de este bien esencial para la vida, los ecosistemas y el desarrollo económico.
Cerca de tres millones en dos años para conservación de cauces
La Confederación ha invertido en los últimos dos años cerca de tres millones de euros en actuaciones de mejora de las condiciones hidromorfológicas de cauces en la provincia de León, dentro del programa anual que desarrolla el Organismo.
Un programa que contempla los trabajos iniciados en el río Órbigo en el mes de septiembre, una zona con problemática relacionada con las inundaciones como constata su registro como Área con Riesgo Potencial Significativo de Inundación (ARPSI).
Retirada de una mota con tres zonas de actuación
Entre las actuaciones llevadas a cabo en Hospital de Órbigo, se ha procedido a la retirada y retranqueo de una mota de aproximadamente 1.300 metros de longitud, con tres zonas de actuación, unos 500 metros aguas arriba de las primeras edificaciones de la localidad, el propio municipio y el entorno del puente.
Los objetivos principales contemplan la recuperación de los procesos fluviales y un funcionamiento más próximo al natural; una mayor laminación de los caudales en épocas de avenida; aumentar la resiliencia del río frente a perturbaciones naturales y antrópicas; fomentar la creación de una estructura sostenible y compatible con los usos del territorio y los recursos fluviales acordados por la sociedad: mejorar medioambientalmente el cauce de manera progresiva y dentro de las posibilidades existentes, así como la calidad del ecosistema fluvial; y promover la evolución natural de la vegetación riparia.
Aunque las actuaciones están en ejecución, la primera evaluación tras las lluvias registradas es satisfactoria al comprobar que ha entrado en funcionamiento la llanura de inundación en la zona de los trabajos, laminando el agua de las crecidas y disminuyéndose los caudales circulantes y la velocidad de la corriente.