
La Mesa de Negociación del Convenio Siderometalúrgico de León ha quedado rota de manera abrupta, lo que anticipa un periodo de tensión y conflicto en un sector crucial para la economía provincial. El sindicato UGT ha sido contundente al denunciar la actitud de la parte patronal, a la que acusa de un inmovilismo que califican de «humillante» para el sector y sus miles de trabajadores.
Según ha manifestado la organización sindical, la patronal se encuentra «acomodada y apoltronada», mostrando una falta de voluntad para abordar cualquier tipo de mejora en las condiciones laborales. La crítica va más allá, ya que desde UGT les acusan directamente de apostar por «retrocesos en los derechos conquistados» por el personal del sector.
Ante este panorama de bloqueo, el sindicato ha anunciado que se ve forzado a convocar un Serla (Servicio de Relaciones Laborales de Castilla y León) con el fin de intentar alcanzar un acuerdo bajo la intermediación de terceros. «El sector del metal es muy importante en la provincia de León y no podemos dejarnos avasallar», han declarado, subrayando la necesidad de proteger los intereses de los trabajadores.
Como medida de presión adicional y ante la gravedad de la situación, UGT ha confirmado que llevará a cabo una serie de movilizaciones en la provincia. La ruptura de la Mesa de Negociación marca un punto de inflexión que podría desencadenar un conflicto laboral si las posturas no logran acercarse en el marco del Serla.