
La reunión, celebrada por videollamada, tuvo como objetivo analizar la evolución de la situación y movilizar todos los recursos del Estado disponibles para luchar contra las llamas que asolan gran parte del país.
Sánchez ha expresado su profundo agradecimiento a los equipos de emergencias desplegados, destacando el esfuerzo y la dedicación de todos los efectivos que, día y noche, trabajan incansablemente para contener la catástrofe. La coordinación es, en este contexto, un pilar fundamental.
La respuesta coordinada y la ayuda internacional
La situación operativa 2, que indica que un incendio es lo suficientemente grave como para requerir la ayuda de medios estatales, ha llevado al Gobierno a activar un amplio despliegue. En este sentido, el sistema Copernicus, a través del Ministerio del Interior, ha comenzado a enviar imágenes de satélite al Centro Nacional de Emergencias (CENEM) para una mejor evaluación de la situación, lo que demuestra la importancia de la tecnología en la gestión de este tipo de crisis.
Además de los recursos nacionales, España ha recurrido al Mecanismo Europeo de Protección Civil. Como resultado, dos nuevos aviones-cisterna Canadair italianos han llegado a la base aérea de Matacán, en Salamanca, y comenzarán a operar de inmediato en las zonas que más necesiten su intervención. Esta colaboración internacional subraya la magnitud de la crisis y la necesidad de una respuesta global.
La coordinación no solo es internacional, sino también interautonómica. Medios de comunidades como Cataluña, País Vasco, la Comunidad Valenciana y Castilla-La Mancha están colaborando activamente en las labores de extinción, demostrando la solidaridad entre regiones en un momento crítico.
El Ministerio para la Transición Ecológica ha desplegado más de 50 medios aéreos y 10 brigadas BRIF helitransportadas con 600 efectivos. A esto se suman equipos especializados en prevención integral (EPRIF) y unidades móviles de análisis (UMAP). La Unidad Militar de Emergencias (UME), bajo el Ministerio de Defensa, ha movilizado a más de 1.400 militares en ataque directo, con otros 2.000 en misiones de apoyo. El 43 Grupo de Fuerzas Aéreas del Ejército del Aire ha intensificado su labor con más de 375 horas de vuelo y 1.077 descargas en lo que va de semana.
La respuesta en tierra también es masiva. Se han movilizado más de 5.000 agentes de la Guardia Civil y más de 350 efectivos de la Policía Nacional, todos en coordinación para asegurar las zonas y colaborar con las brigadas de extinción. Esta cifra de recursos activados demuestra la magnitud del desafío y la firmeza del compromiso gubernamental para enfrentar la emergencia.
Impacto en la sociedad y respuesta humanitaria
La crisis de los incendios no solo afecta al medio ambiente, sino también a la vida diaria de los ciudadanos. La suspensión de la comunicación ferroviaria entre Madrid y Galicia, por ejemplo, ha afectado a numerosos viajeros. En respuesta, el Gobierno ha activado un acuerdo con la Cruz Roja para atender a las personas afectadas, lo que demuestra que la respuesta del Estado abarca tanto la extinción de los fuegos como la asistencia humanitaria a la población. Ya se ha atendido a decenas de personas en las estaciones de A Coruña y Santiago de Compostela.
Visita a las zonas afectadas
Para supervisar de cerca los operativos y mostrar el apoyo del Gobierno, el presidente Pedro Sánchez ha anunciado que visitará las zonas afectadas por los incendios. Mañana se desplazará a Ourense y León, donde se reunirá con los responsables de los dispositivos de emergencia en el lugar de los hechos. Posteriormente, se espera que también visite otras zonas afectadas a lo largo de la próxima semana.
La lucha contra los incendios forestales es una batalla constante y desafiante. La respuesta del Gobierno, coordinada y con todos los recursos disponibles, busca no solo controlar el fuego, sino también enviar un mensaje de solidaridad y compromiso con las comunidades que sufren esta devastadora tragedia.