Un croissant es un delicioso panecillo de hojaldre con forma de medialuna, característico de la repostería francesa. A continuación, te comparto una receta sencilla para prepararlo en casa:
Ingredientes:
- Para la masa:
- 500 g de harina de trigo
- 50 g de azúcar
- 10 g de sal
- 20 g de levadura fresca o 7 g de levadura seca
- 200 ml de leche tibia
- 50 ml de agua tibia
- 50 g de mantequilla (para la masa)
- Para el laminado:
- 250 g de mantequilla (fría, pero moldeable)
- Para el glaseado:
- 1 huevo
- 1 cucharada de leche
Instrucciones:
- Preparar la masa:
- En un bol grande, mezcla la harina, el azúcar y la sal.
- Diluye la levadura en el agua tibia y agrégala junto con la leche a la mezcla de harina.
- Incorpora los 50 g de mantequilla y amasa hasta obtener una masa suave y elástica.
- Cubre con un paño limpio y deja reposar en un lugar cálido durante 1 hora o hasta que duplique su tamaño.
- Laminado con mantequilla:
- Extiende la mantequilla fría entre dos hojas de papel de hornear hasta formar un rectángulo delgado (de unos 20 x 15 cm). Refrigera.
- Estira la masa en forma de rectángulo y coloca la mantequilla en el centro.
- Dobla la masa sobre la mantequilla como si cerraras un sobre y sella los bordes.
- Haz tres pliegues simples: estira la masa en forma de rectángulo, dóblala en tercios (como un folleto), refrigera por 20-30 minutos y repite dos veces más.
- Formar los croissants:
- Estira la masa hasta que tenga unos 3-4 mm de grosor y corta triángulos alargados.
- Haz un pequeño corte en la base de cada triángulo y enrolla hacia la punta para formar el clásico croissant.
- Coloca los croissants en una bandeja con papel de hornear, dejando espacio entre ellos. Deja fermentar por 1 hora.
- Horneado:
- Precalienta el horno a 200 °C.
- Mezcla el huevo con la leche y pincela los croissants.
- Hornea durante 15-20 minutos o hasta que estén dorados.