La excelencia enológica de la provincia de León volvió a ser reconocida este viernes con la entrega de los IV Premios Pisado, organizados por la Diputación de León. El emblemático patio del Palacio de los Guzmanes acogió la ceremonia donde cinco vinos con Denominación de Origen se alzaron como ganadores en sus respectivas categorías, reafirmando la calidad y diversidad de los caldos leoneses.
Los máximos galardones recayeron en:
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‘Rapolao’, de Dominio de Anza, como mejor tinto con crianza.
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‘La Revelia’, de Bodegas Emilio Moro, como mejor blanco con crianza.
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‘Heredad 26 Mencía’, de Heredad Morán y López, como mejor tinto sin crianza.
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‘Pardevalles Blanco’, de Pardevalles, como mejor blanco sin crianza.
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‘Viña Trasderrey Rosado’, de S. Coop. Vinos de la Rinera del Cea, como mejor rosado.
Además, diez vinos recibieron accésits en reconocimiento a su alta calidad, destacando nombres como Carroleon, La Padorniña, Valdepiñeiro, Para Muestra un Botón, Pincerna, Pago de Valdoneje, Abad Dom Bueno Godello, Trasto, Vega Carriedos Rosado y Auterolo Rosado.
El presidente de la Diputación, Gerardo Álvarez Courel, elogió el nivel de los vinos presentados —un total de 69— y subrayó que estos premios “se consolidan como referente del sector vitivinícola leonés”. Courel destacó también la importancia del sector agroalimentario en la economía provincial y el papel de la marca Productos de León, creada en los años 90, como instrumento de impulso y diferenciación para productos de calidad.
Por su parte, el vicepresidente y responsable de Productos de León, Roberto Aller, definió los vinos de León como un “valor seguro” y llamó a la colaboración de todos los actores del sector, especialmente a los hosteleros: “Son quienes tienen la oportunidad de mostrar nuestros caldos a los turistas, cuyo número no deja de crecer”.
El jurado de esta edición estuvo formado por representantes de las Denominaciones de Origen Bierzo y León, así como por sumilleres profesionales, encargados de evaluar minuciosamente los vinos para otorgar los reconocimientos.
Con esta gala, la Diputación de León reafirma su apuesta por la promoción de la viticultura local, reconociendo el esfuerzo y la pasión de bodegueros, enólogos y productores que hacen de León una tierra de vinos con identidad propia y prestigio creciente.
