![](https://ahoraleon.com/wp-content/uploads/2024/08/empleovulnerable.jpg)
La Consejería de Industria, Comercio y Empleo, cuya titular ostenta además la presidencia del Servicio Público de Empleo de Castilla y León, ha presentado al Consejo de Gobierno el informe de resultados de las políticas activas de empleo desarrolladas por ECYL a lo largo del pasado ejercicio y que han contribuido a dinamizar el mercado laboral y a impulsar la creación de empleo en la Comunidad.
Este impulso se refleja en los datos de la Encuesta de Población Activa, que señala que Castilla y León incrementa la ocupación y reduce el desempleo. La Comunidad cerró el pasado año con más de un millón de ocupados y con una importante reducción del desempleo que sitúa la tasa de paro en 8,23 %, dos puntos y medio por debajo de la media nacional.
Las políticas activas de empleo desarrolladas por la Junta de Castilla y León tienen por objeto mejorar la empleabilidad, facilitar la transición entre empleos, impulsar el desarrollo de capacidades y competencias profesionales para su mejor adaptación al tejido productivo y promover la inclusión sociolaboral de los colectivos más vulnerables. Al mismo tiempo, tratan de contribuir a mejorar la competitividad de las empresas y su capacidad de creación de empleo.
De acuerdo con el informe de resultados presentado hoy, la Consejería de Industria, Comercio y Empleo, a través del ECYL, ha invertido más de 279 millones de euros en el desarrollo de políticas activas de empleo y ha prestado servicios a más de 287.000 usuarios, entre trabajadores desempleados y ocupados y empresas. Estos servicios se estructuran en torno a tres ejes fundamentales y con un enfoque coordinado: apoyo directo a la contratación y al autoempleo, formación para el empleo en línea con las necesidades del mercado laboral, e intermediación y orientación laboral facilitando y promoviendo el contacto entre trabajadores y empresas.
82 millones para Impulsar la contratación y el autoempleo
Las medidas para incentivar la contratación han jugado un papel fundamental en la dinamización del tejido productivo, y han logrado la inserción laboral efectiva de más de 9.700 desempleados. Se han destinado más de 30 millones de euros a fomentar la contratación en las empresas y apoyar el autoempleo, lo que ha permitido la creación de más de 4.000 puestos de trabajo a través del empleo por cuenta propia o del empleo por cuenta ajena.
El otro pilar esencial de este eje son los programas de empleo local, en los que se han invertido 52 millones de euros. A través de estos programas, las entidades locales han podido contratar a lo largo del pasado ejercicio a 5.600 trabajadores que estaban en situación de desempleo. Estas contrataciones se han realizado fundamentalmente en el medio rural contribuyendo a la cohesión territorial, a la dinamización económica y a la mejora de servicios en el ámbito rural. Además, las contrataciones se han dirigido de forma preferente a los colectivos más vulnerables o con mayores dificultades de acceso al mercado laboral, así como a los municipios mineros.
Más de 78.000 personas han participado en los programas de formación para el empleo
El eje de la formación, como elemento esencial de las políticas activas de empleo, ha contado con una inversión cercana a los 159 millones de euros y ha beneficiado a más de 78.000 personas. Los programas desarrollados se han orientado fundamentalmente a mejorar la sintonía entre la oferta y la demanda de empleo, alineando la cualificación de los trabajadores con las necesidades reales de las empresas, y ajustando la oferta formativa a las necesidades de cada colectivo.
El mayor esfuerzo se ha dirigido a la formación de trabajadores desempleados para mejorar sus oportunidades de empleo o facilitar el tránsito a una nueva ocupación profesional. En estos programas se han invertido 67,7 millones de euros y han participado 20.400 trabajadores en situación de desempleo. Se han destinado otros 24 millones de euros a la formación de trabajadores ocupados, mejorando la formación y la capacitación profesional de 48.000 trabajadores. Además, desde el Servicio Público de Empleo de Castilla y León, se ha hecho una apuesta clara por la formación dual, combinando formación y empleo para más de 6.900 trabajadores con una inversión de 67 millones de euros.
Modernización y más de 200.000 usuarios en los servicios de intermediación y orientación
El tercero de los ejes, el de intermediación y orientación laboral, que ha contado con un presupuesto de cuatro millones de euros, se ha prestado fundamentalmente a través de las 54 oficinas del ECYL, distribuidas por todo el territorio de la Comunidad, y ha permitido dar servicio a más de 200.000 personas. En este eje se ha prestado también apoyo a entidades especializadas y que desarrollan actuaciones de calado dirigidas a colectivos especialmente vulnerables, tales como Cruz Roja o Fundación Secretariado Gitano.
En la prestación de estos servicios, la Consejería de Industria, Comercio y Empleo ha hecho un esfuerzo adicional durante los últimos meses para mejorar la accesibilidad y la eficiencia, implementado avances significativos, tales como un sistema de difusión automática de ofertas de empleo que agiliza el acceso a oportunidades laborales, un módulo específico de atención empresarial que facilita la contratación de trabajadores con perfiles adecuados, o un Plan de Atención a Personas Mayores de 45 años.
Este esfuerzo de modernización va a continuar a lo largo de este ejercicio con la incorporación de herramientas de inteligencia artificial en la intermediación laboral, o el desarrollo de una plataforma integral para la gestión telemática de trámites, garantizando la máxima accesibilidad y eficiencia en los servicios.