El Aula Magna de la Universidad de León ha acogido este jueves el solmene acto de apertura del Curso Académico 2024/2025 en una ceremonia presidida por la rectora Nuria González Álvarez, la consejera de Educación, Rocío Lucas, y los rectores de las universidades públicas de Castilla y León.
La lectura de la memoria del pasado curso a cargo de la secretaria general y la entrega de los Premios Extraordinarios de Fin de Carrera de Grado y Máster dieron inicio a una ceremonia en la que la doctora Susana Rodríguez Escanciano fue la encargada de ofrecer una lección inaugural para abordar la proyección de la inteligencia artificial en las Relaciones Laborales.
Precisamente, la rectora puso de manifestó la gran responsabilidad que tiene la Universidad, como institución generadora de conocimiento, de liderar la adaptación social a los avances tecnológicos. “No podemos permanecer al margen de las innovaciones y la evolución digital e inteligencia artificial. Es imprescindible que las universidades asuman el liderazgo en este cambio”.
Es por ello, que se mostró convencida con que las tradiciones no deben estar en conflicto con el progreso, ni la continuidad con la vocación de renovación, la misma con la que afronta el equipo de gobierno de la Universidad de León el nuevo curso académico.
OFERTA FORMATIVA DE VANGUARDIA
En su primer discurso de apertura de curso académico como rectora de la Universidad de León, González trasladó la ilusión y el compromiso de su equipo con impulsar el potencial de la institución académica. “Tenemos el deber de hacer una Universidad más competitiva a través de una oferta formativa de vanguardia, con un enfoque claro en la empleabilidad de nuestros egresados, y mediante el impulso de acciones ambiciosas en investigación, transferencia de conocimiento e internacionalización”.
En este sentido, la rectora insistió en la necesidad de implantar el Grado de Medicina y Cirugía, sin ocultar las grandes expectativas puestas en la reunión que mantendrá el próximo 2 de octubre con el presidente de la Junta de Castilla y León. “En ella volveré a presentar la memoria en la que hemos trabajado durante los últimos meses y en la que demostramos que es un proyecto es viable”, señaló Nuria, que recordó que la implantación del nuevo grado no sólo responde a intereses académicos sino a necesidades sociales derivadas de un aumento de la demanda sanitaria. En sus peticiones a la Junta de Castilla y León, González además solicitó un desarrollo normativo regional en consonancia con la Ley Orgánica del Sistema Universitario (LOSU) y, en consecuencia, garantice una financiación adecuada que incluya la firma del convenio del Programa Integra para la incorporación de talento y la aprobación
del Plan de Infraestructuras.
Durante su discurso, repasó algunos de los compromisos de su equipo de gobierno que, en los tres primeros meses de mandato, ya se han hecho realidad, como el nuevo reglamento de carrera profesional horizontal del personal técnico, de gestión y administración de servicios (PTGAS), que se aprobará en el próximo Consejo de Gobierno; la ampliación del horario de la Biblioteca Central; o la puesta en marcha del área de Universidad Saludable.
El acto contó con la participación de los rectores de las universidades de Salamanca, Juan Manuel Corchado; de Valladolid, Antonio Largo Cabrerizo; de Burgos, Manuel Pérez; así como una representación de vicerrectores de las universidades de Oviedo, la Miguel de Cervantes y la Universidad Pontificia de Salamanca.
Asimismo, contó con la asistencia del presidente del Consejo Social de la Universidad de León, Javier Cepedano; el presidente de las Cortes de Castilla y León, Carlos Pollán; el alcalde del Ayuntamiento de León, José Antonio Diez; el presidente del Consejo de Cuentas de Castilla y León, Mario Amivilia; el Procurador del Común, Tomás Quintana; el subdelegado del Gobierno en León, Héctor Aláiz; y el delegado territorial de la Junta, Eduardo Diego.
A la ceremonia asistieron además una nutrida presencia de autoridades civiles, militares y eclesiásticas, representantes de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del
Estado, colegios profesionales y empresas, así como miembros de la comunidad
universitaria.