La consejera de Industria, Comercio y Empleo, Leticia García, ha inaugurado hoy en Palencia la jornada de orientadores de empleo y formación organizada por Fundación Secretariado Gitano, un encuentro que reúne a más de medio centenar de profesionales del programa ‘Acceder’ que la Fundación Secretariado Gitano desarrolla en distintas provincias de Castilla y León.
Durante su intervención, la consejera ha destacado el firme compromiso del Ejecutivo autonómico con la inclusión social y laboral de los colectivos con mayores dificultades de empleabilidad, y ha subrayado que el empleo no es sólo una herramienta para mejorar las condiciones de vida de la población gitana garantizando su autonomía económica y su desarrollo personal y profesional, sino también un elemento esencial para avanzar en la plena integración social de un colectivo que históricamente ha sufrido situaciones de discriminación y exclusión social.
En línea con este compromiso, la Consejería de Industria, Comercio y Empleo ha reforzado su apoyo a los programas de empleo que promueve la Fundación Secretariado Gitano con una inversión de 262.000 euros, lo que supone duplicar la financiación que se venía destinando a las iniciativas de inserción laboral a través de esta entidad.
Concretamente, la aportación económica de la Junta de Castilla y León va destinada a apoyar los programas ‘Acceder Joven’ –que desarrolla itinerarios integrados de inserción para personas jóvenes gitanas– y ‘Aprender Trabajando’ –enfocado a la orientación, intermediación y formación para el empleo de los jóvenes pertenecientes a la comunidad gitana en situación de mayor vulnerabilidad–.
El programa ‘Acceder’, que fue pionero en Castilla y León y que cumple 25 años se desarrolla en Aranda de Duero, Burgos, León, Palencia, Salamanca, Segovia, Valladolid y Zamora. La iniciativa ofrece un modelo integral de acompañamiento a las personas en búsqueda de empleo, facilitando formación específica, orientación laboral y mediación con empresas. Por su parte, ‘Aprender Trabajando’ busca dar una oportunidad a los jóvenes en situación de especial vulnerabilidad, con escasos recursos y baja cualificación, ofreciendo, junto a una beca, un programa formativo teórico práctico que se lleva a cabo en entornos laborales reales para aprender a desempeñar distintas ocupaciones dentro de la empresa, garantizando así la polivalencia.
En esta jornada, profesionales de distintos perfiles, entre los que destacan orientadores laborales, intermediadores y agentes interculturales han compartido experiencias y estrategias de inserción laboral en el marco de un modelo de trabajo de éxito como demuestran los resultados del programa ‘Acceder’ en Castilla y León.
Durante el pasado año el impacto del este programa en la empleabilidad de la población gitana se tradujo en más de 2.361 personas atendidas en itinerarios personalizados de inserción laboral, 723 contratos firmados, 696 personas participantes en acciones formativas para la mejora de su cualificación profesional, y la colaboración de 391 empresas en labores de intermediación y sensibilización.
La consejera ha destacado la importancia de la colaboración entre la Junta de Castilla y León y las entidades del Tercer Sector, como la Fundación Secretariado Gitano, a la hora de garantizar la igualdad de oportunidades y mejorar la empleabilidad de quienes más lo necesitan. Además, ha recordado que las políticas activas de empleo impulsadas desde el Servicio Público de Empleo de Castilla y León priorizan la atención a colectivos con mayores dificultades de acceso al mercado de trabajo, como puede ser el colectivo de jóvenes gitanos.
Apoyo al emprendimiento, a los jóvenes y a las mujeres de la comunidad gitana
La titular de la Consejería ha invitado también a los orientadores laborales a fortalecer el espíritu emprendedor que siempre ha demostrado la comunidad gitana, recordando que la Administración autonómica cuenta con distintas líneas de apoyo al autoempleo y al emprendimiento, que pueden y deben ser aprovechadas por un colectivo que históricamente ha apostado por el autoempleo como una de las fórmulas tradicionales y habituales de acceso al empleo, tanto a través de la venta ambulante como a través de otras actividades.
García ha subrayado la importante labor de los programas de empleo y formación que desarrolla Secretariado Gitano facilitando la cualificación profesional de las personas gitanas, especialmente de los jóvenes, en ocupaciones con alta demanda de trabajo. Una labor muy necesaria si se tiene en cuenta que el porcentaje de jóvenes que ni estudian ni trabajan dentro de la comunidad gitana es muy superior a la media, con el añadido de que muchos abandonan su formación a edades tempranas y asumen cargas familiares rápidamente, situación que se agudiza entre las mujeres gitanas.
En este sentido, la consejera ha señalado que el empleo no sólo es clave en la lucha contra la exclusión social y la discriminación de la población gitana, sino que también es esencial para avanzar en la igualdad de las mujeres gitanas. La formación y la inserción laboral son herramientas imprescindibles para el empoderamiento de las mujeres gitanas y para que mujeres y jóvenes pueden elegir su propio proyecto de vida y participar plenamente en todos los ámbitos de la sociedad. De ahí la importancia del papel de los orientares y de los agentes interculturales, situándose junto a ellos, tratando de dar respuesta a sus necesidades y canalizando sus potencializades.
Finalmente, García ha señalado que la mejor forma de celebrar el ‘Año del pueblo gitano en España’, con motivo del 600 aniversario de su presencia documentada en la península ibérica, es avanzar en su acceso al empleo, porque eso mejorará sus condiciones de vida, pero también porque Castilla y León no puede prescindir del potencial de los cerca de 27 mil ciudadanos gitanos de la Comunidad.
Éste debe ser un año para derribar prejuicios y mejorar la imagen de la población gitana pero, sobre todo, debe ser el año para avanzar en el empleo de la mano del emprendimiento y de las empresas de Castilla y León, a las que agradeció, también, su colaboración con las entidades que trabajan en favor de la comunidad gitana. Una implicación que nace de la responsabilidad social de las empresas y que es fundamental para favorecer tanto la igualdad de oportunidades y la inclusión como una imagen positiva de este colectivo.
