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La antigua azucarera Santa Elvira tendrá una segunda vida

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El Ayuntamiento de León ha adjudicado las obras de los cerramientos de la antigua azucarera Santa Elvira con el fin de retirar los arriostramientos y dar usabilidad a este espacio. La Junta de Gobierno Local celebrada este viernes ha adjudicado el contrato en el que se incluye la redacción de proyecto de ejecución, la dirección de obras y de ejecución, la coordinación de seguridad y salud y la propia ejecución de la intervención. La adjudicataria del procedimiento de concurrencia competitiva ha sido la empresa Decoración y Construcción de Obras Leonesas SA, Decolesa, la cual obtuvo la puntuación más alta en la licitación. El valor de esta es de 4.450.000 euros, IVA incluido.

Una vez adjudicado este contrato, el siguiente paso será la formalización del mismo que conllevará la también la firma del inicio de las obras. Una vez en marcha, el plazo para el desmontaje de los actuales arriostramientos será de ocho meses y el plazo de ejecución total del contrato será de 15 meses.  La garantía ofertada por la empresa una vez finalizadas y recepcionadas las obras por el Ayuntamiento de León es de 36 meses.

“Lo importante ahora es dar un uso al espacio y aprovecharlo para continuar ampliando el recinto del Palacio de Congresos y Exposiciones para atender la alta demanda de eventos que se están llevando a cabo en este espacio”, ha asegurado el concejal de Desarrollo Urbano, Luis Miguel García Copete, quien destaca la importancia patrimonial de la antigua azucarera Santa Elvira para la ciudad de León por su arquitectura y por lo que supuso para la economía de la capital leonesa a mediados del siglo pasado.

El proyecto de Decolesa propone una recuperación de este edificio comprometida “con la recuperación de su memoria histórica, como un elemento de la herencia cultural de la ciudad” y se fija como objetivo principal “la eliminación de los actuales arriostramientos provisionales de la fachada, en consonancia con las bases del concurso convocado, pero busca una intervención que trascienda el mero concepto estructural para convertirse en una actuación en la que el patrimonio cultural se convierte en un activo dinamizador urbano”. Así figura en la memoria presentada y valorada en el concurso convocado por el Ayuntamiento de León previo a la adjudicación.

La actuación pretende mantener la estabilidad estructural de las fachadas al tiempo que propone la construcción de una nueva estructura interior, la cual tendrá la función de arriostramiento de las fachadas y servirá de soporte a las actuaciones a realizar en el recinto y, al mismo tiempo, será la base de una futura estructura definitiva que se realice cuando las futuras disponibilidades presupuestarias del Ayuntamiento lo permitan.

La propuesta de Decolesa explica que con “la eliminación de los elementos de arriostramiento exteriores de la fachada se modificará el paisaje urbano actual, y mejorará la percepción que tienen los vecinos del edificio”. En ella contemplan la creación de un espacio cerrado para la celebración de congresos de unas 250 personas así como proponen una serie de espacios libres para usos diversos, como podrían ser la preparación de eventos con catering, exposiciones, actividades y terrazas al aire libre, etc. Simultáneamente proponen un espacio urbano de calidad para el barrio en el que desarrollar actividades colectivas lúdicas, de ocio o culturales con múltiples usos como conciertos, cine, teatro, recitales, proyecciones o presentaciones, espacios de juego, etc. Dentro de toda la intervención cobrará especial importancia la chimenea del recinto, símbolo de la nueva azucarera “que lucirá en la noche leonesa como un faro de esa ‘fábrica encendida’ que anuncia un centro de actividad y desarrollo”, recoge el proyecto de Decolesa.

La propuesta adjudicada este viernes ha sido denominada como ‘Azúcar y sal’ y pone el foco sobre la dimensión social de la actuación que se propone, creando un nuevo espacio urbano de convivencia que conecte y dinamice el barrio de la Sal y el actual Palacio de Exposiciones. “’Azúcar y sal’ supone la transformación completa de una ruina en un espacio público lleno de vitalidad y dinamismo”, concluye la memoria presentada al proceso de licitación y que ahora ve la luz.

El equipo multidisciplinar que Decolesa pondrá a los mandos de la ejecución de este proyecto contará, al menos, con un arquitecto experto en proyectos de rehabilitación de edificios catalogados y protegidos. El director del equipo y autor principal será un experto en proyectos de estructuras de edificación singulares, así como habrá otro especializado en proyectos de urbanización en suelo urbano y uno más en proyectos relacionados con recintos destinados a eventos públicos con afluencia superior a las 2.000 personas. El equipo está compuesto por al menos cuatro técnicos con titulaciones universitarias superiores diferentes pero siempre relacionadas con áreas de conocimiento relacionadas con el objeto del contrato, lo que supone un aval para la correcta ejecución de un proyecto que pivota sobre los principios rectores de sostenibilidad técnica, económica y social y las dimensiones cultural, creativa y verde de la actuación.

 

 

 

 

 

 

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