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La Asamblea Local de IU en León valora como insuficientes las 116 propiedades devueltas por la Iglesia Católica en León, de un total de 2996 que estaban bajo sospecha. Carmen Franganillo, coordinadora local considera que “es un número totalmente irrisorio, sobre todo si tenemos en cuenta que entre 1998 y 2015 se inmatricularon de forma sospechosa casi 3000 propiedades. El mero reconocimiento de esas 116 implica asumir que, aprovechándose de la Ley Hipotecaria promulgada por el PP de Aznar, la Iglesia se apropió de forma indebida de numerosas propiedades que, en su mayor parte, eran de titularidad pública, de los vecinos y los pueblos. Es, sin lugar a dudas, un modo de apropiación indebida de bienes públicos”.
Desde IU León señalan como “muy sospechosos” los numerosos casos de propiedades que el informe realizado por la Conferencia Episcopal engloba en categorías opacas, como errores, falta de datos, ventas, etc. Por ello, exigen “una profunda investigación sobre ese tipo de bienes, no solo en su forma de adquisición, sino también en aquellos que hayan podido venderse, donarse o permutarse, ya que es muy posible que encierren una primera inmatriculación fraudulenta previa a la operación de compraventa, por lo que la Iglesia habría obtenido beneficios económicos en transacciones sobre propiedades que, en términos legales, no eran suyas, sino fruto de las trampas de inmatriculación”. Asimismo, no descartan que este tipo de métodos hayan podido generar tramas de corrupción inmobiliaria, donde la Iglesia, amparada en la Ley Hipotecaria, haya podido inmatricular propiedades para luego venderlas o permutarlas, con las consiguientes pérdidas para los vecinos.
Por otro lado, Víctor Bejega, Secretario de Organización, hace hincapié “en la cuestión del patrimonio histórico, donde es más que evidente el descontrol que existe. La inexistencia de catálogos completos y exhaustivos del Patrimonio Histórico y Cultural de la Iglesia Católica, provoca un constante movimiento y traslado de muchos objetos de los que, en muchas ocasiones, se pierde la pista, como han denunciado ya muchos municipios. Por otro lado, si bien la Iglesia es propietaria de muchos inmuebles y monumentos históricos, la situación de abandono, deterioro y ruina de muchos de ellos por falta de mantenimiento y conservación está provocando la pérdida irreparable de auténticas joyas históricas”. En este sentido, exigen a la Iglesia cumplir con la Ley de Patrimonio en cuanto a la conservación de los edificios de los que ostentan la titularidad, o a su cesión al ente público si no son capaces de mantenerlos. También exigen a la Junta de Castilla y León un mayor control sobre la situación de este patrimonio y a tomar las medidas que recoge la Ley de Patrimonio para evitar las pérdidas patrimoniales y la “carta blanca” a la Iglesia.
