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Bajo el título ‘Antonio Gamoneda. Muestra y entorno de una vida comprometida con el arte’, el Instituto Leonés de Cultura de la Diputación Provincial ofrece a todos los amantes de la literatura y de las artes plásticas una exposición sobre la muy estrecha relación que este gran poeta y gestor cultural ha mantenido, a lo largo de toda su trayectoria, con el mundo del arte. La muestra ha sido inaugurada este domingo en el Museo de la Industria Harinera (MIHACALE) de Gordoncillo, con motivo de la entrega a Gamoneda del Premio Espiga de Oro que convoca este municipio del Sur de León para reconocer y resaltar grandes trayectorias creativas, y así, en la edición anterior fueron galardonados los escritores Luis Mateo Díez y José María Merino. El ILC también colaboró en esa ocasión con una exhibición sobre sus respectivos legados.
La entrega del premio Espiga de Oro y la apertura de la exposición fueron las dos caras de un gran acto de homenaje a quien es uno de los poetas con mayor reconocimiento y huella literaria tanto a nivel nacional como internacional, premio Cervantes en 2006. Una nutrida representación de los ámbitos cultural, social e informativo de la provincia se dio cita en el MIHACALE para acompañar a Antonio Gamoneda en tal ocasión. Entre ellos se encontraban Pablo López Presa, diputado de Cultura en funciones, y Luis García Martínez, director del Departamento de Arte y Exposiciones del ILC, quien ofreció a todos los presentes un muy documentado recorrido a través de las distintas obras que componen la exposición.
En el ‘Ofrecimiento y saludo’, Gamoneda expresa que esta exhibición constituye “la presentación de la que es mi colección de piezas artísticas y artesanales, colección que se corresponde con más de cincuenta años de aproximación crítica a las artes visuales y a las artesanías con valor antropológico y estético. También se corresponde con mi propia y comprometida vida, con la amistad y la colaboración intercambiada con pintores, dibujantes y escultores, que esta significación tiene buena parte de las piezas reunidas”.
“La exposición no será valiosa en términos económicos, cosa que sí suele ocurrir en los coleccionismos, pero me atrevo a decir que es cumplidamente representativa de orientaciones contemporáneas del arte -proseguía el autor-. En otro sentido, con menor presencia, lo es también de una creatividad artesanal (limitada ésta a la Península Ibérica), y más modestamente aún, de manifestaciones plásticas étnicas, americanas, asiáticas y africanas. Mis deseos quedarán muy bien cumplidos si la exposición supone, para todos cuantos quieran acercarse, una aceptable cuota de conocimiento y placer”.
La muestra supone también la culminación de una intensa agenda cultural en torno a la creación literaria, el ciclo ‘Letras en la Panera’, coordinado por Alfonso García y que desde principios del pasado mes de mayo ha llevado hasta Gordoncillo actos como el recital poético en torno a la obra de Gamoneda, Pereira y De Nora a cargo de Mercedes G. Rojo y Jimena Pérez; la conferencia ‘El oficio de mentir’, impartida por Julio Llamazares; y el concierto ‘De espiga a golondrina’, ofrecido por la cantautora Isamil9.
Durante el acto, presentado por el alcalde de Gordoncillo, Urbano Seco, se puso también de relevancia la fundamental vinculación de Antonio Gamoneda con la institución provincial, pues el poeta estuvo al frente de los Servicios Culturales de la Diputación, antecesores del Instituto Leonés de Cultura, durante la década de los setenta. El catedrático de Literatura José Enrique Martínez, excepcional conocedor de la poesía española contemporánea, fue el encargado de ofrecer al público las principales claves creativas y humanas del autor de ‘Descripción de la mentira’.
Además de Museo de la Industria Harinera de Castilla y León, este amplio equipamiento acondicionado en la antigua Panera de Gordoncillo y actualmente dirigido por María Ordás, se ha convertido en un relevante y dinámico espacio cultural cuyos esfuerzos se dirigen tanto a preservar la memoria de la tradicional actividad harinera -con gran detalle y despliegue de objetos y maquinarias- como a luchar contra la despoblación rural a base de una programación cultural y social de calidad. Así, su planta alta, el lugar donde antaño se almacenaba y ventilaba la harina, ha sido convertida en una espectacular sala de exposiciones temporales que ya ha acogido numerosas iniciativas relacionadas con el mundo de la creación; en ella son visibles los anchos muros de tierra con los que fue levantado este edificio ampliamente representativo de la arquitectura vernácula de la comarca, y la admirable cubierta a base de madera de chopo.
‘Antonio Gamoneda. Muestra y entorno de una vida comprometida con el arte’ podrá contemplarse en el Museo de la Industria Harinera de Gordoncillo hasta el último día del mes de octubre y de acuerdo con el siguiente horario: de miércoles a domingo, de 11.00 a 14.00 y de 15.00 a 18.00.
