
El líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, ha calificado como una «crisis nacional» la situación de los incendios en España y ha hecho un llamamiento directo al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para que despliegue la totalidad del Ejército. En una comparecencia ante los periodistas desde León, el dirigente ‘popular’ ha exigido la movilización de todos los recursos militares, incluyendo maquinaria pesada y medios aéreos, para reforzar las labores de extinción.
Feijóo ha valorado positivamente el trabajo que ya está realizando la UME (Unidad Militar de Emergencias), que se encuentra desplegada en varios territorios. Según los datos del Gobierno, hay 1.300 militares combatiendo directamente las llamas y otros 1.200 en labores de apoyo, con un total de 440 medios facilitados. Sin embargo, el líder de la oposición ha insistido en que, dada la gravedad de la situación, se necesitan «medios extraordinarios». «Pido que el Ejército de España ponga sus medios operativos, su maquinaria pesada y medios aéreos para ayudar en la extinción», ha solicitado, enfatizando que su despliegue mejoraría la respuesta por su «fuerza operativa y logística».
A pesar de su insistencia en la necesidad de más recursos, el líder del PP ha mostrado su disconformidad con que las comunidades autónomas eleven el nivel de emergencia a 3. Feijóo ha explicado que un nivel de alerta 3 transferiría el mando de la gestión al Gobierno central, algo que, a su juicio, no es necesario. Ha argumentado que las comunidades «conocen mejor el terreno» y ha reconocido que ninguna ha solicitado aún este cambio de nivel. De esta manera, ha marcado una distinción clara: exige que el Ejecutivo movilice más medios militares, una decisión que solo puede tomar el Gobierno, pero sin que las autonomías pierdan el control operativo sobre el terreno.
En su intervención, Feijóo ha advertido de que lo «peor» de la crisis nacional está todavía por llegar. También ha aprovechado para criticar duramente las formas del Gobierno, a las que ha calificado como una «política cutre». En una clara referencia a las publicaciones del ministro de Transportes, Óscar Puente, ha recriminado los «tuits groseros» y la «permanente intensidad en las provocaciones», que considera inapropiadas en un momento de crisis. «Es el momento de una política de Estado y es el momento de olvidarse de la política cutre, de los tuits groseros», ha recriminado.