La tensión política en el Ayuntamiento de San Andrés del Rabanedo continúa en aumento. El Grupo Municipal Socialista ha emitido un comunicado contundente en el que responsabiliza directamente al equipo de gobierno de la UPL de la situación de bloqueo administrativo que vive el consistorio. Según el PSOE, la actual falta de interventor y los consecuentes retrasos en los pagos no son fruto de la mala suerte, sino de una decisión política errónea: ignorar los requerimientos de la Junta de Castilla y León.
El origen del bloqueo: una advertencia ignorada en mayo
El principal foco de la crítica socialista se centra en el procedimiento fallido para nombrar un interventor interino, la figura clave para fiscalizar las cuentas y liberar las nóminas. Desde el PSOE recuerdan que, a finales del pasado mes de mayo, la Administración Autonómica notificó al Ayuntamiento que la composición del tribunal no era la adecuada.
«Si el equipo de gobierno hubiera rectificado y anulado el decreto del 21 de mayo como ordenó la Junta, en poco más de un mes habrían tenido nombrado a un interventor», aseguran desde las filas socialistas. Sin embargo, acusan a la UPL de actuar con «soberbia y victimismo», decidiendo seguir adelante con un procedimiento viciado bajo la excusa de no paralizar el Ayuntamiento. «Justamente lo que ha conseguido la UPL con su cabezonería es la parálisis total, la cual están pagando los empleados públicos y los vecinos», sentencian.
El caos de las nóminas y la «culpa a terceros»
El retraso en el abono de las nóminas de diciembre ha sido el detonante de este nuevo cruce de acusaciones. Los socialistas critican que los leonesistas «siguen echando balones fuera», culpando alternativamente al departamento de personal, a los sindicatos e incluso a la carga de trabajo derivada de la actualización salarial de 2024 y 2025.
«No actuar o actuar con soberbia y señalar a otros es lo que mejor sabe hacer la UPL», afirman desde el PSOE, tras recordar que el gobierno local intentó responsabilizar a un sindicato por «presionar» para que la actualización salarial no se hiciera de forma escalonada, lo que colapsó el departamento.
Basuras y estabilización: otros frentes abiertos
La crítica del PSOE no se limita al área económica. Denuncian también la gestión de los recursos humanos y los servicios básicos:
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Plazas de estabilización: Los socialistas acusan al gobierno de «vender humo», señalando que se han perdido más de cinco meses sin firmar los certificados de servicios prestados necesarios, algo ajeno a la falta de interventor.
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Recogida de basura: Alertan sobre la avería de tres camiones municipales, una situación que provocará retrasos en el servicio y de la que, aseguran, no se informó a la oposición en la comisión informativa del pasado 22 de noviembre.
El comunicado concluye con un duro reproche a la actitud del equipo de gobierno: «Para la UPL todo será culpa de la falta de interventor, de la oposición, de la Junta o de las inclemencias meteorológicas, pero la realidad es que la parálisis es responsabilidad única de su falta de trabajo y previsión».