
Este día se dedica a concienciar sobre esta enfermedad crónica y autoinmune que afecta a millones de personas en todo el mundo.
¿Qué es el Síndrome de Sjögren?
El Síndrome de Sjögren es un trastorno del sistema inmunitario en el cual el cuerpo ataca por error sus propios tejidos y órganos sanos. Se caracteriza principalmente por la sequedad de ojos y boca debido a que el sistema inmune ataca las glándulas que producen lágrimas y saliva.
Aunque la sequedad es el síntoma más común, el síndrome de Sjögren es una enfermedad sistémica, lo que significa que puede afectar a otras partes del cuerpo, incluyendo articulaciones, piel, pulmones, riñones, vasos sanguíneos y nervios, causando una amplia variedad de síntomas.
Síntomas comunes:
- Ojos secos (xeroftalmia): Sensación de ardor, picazón, arenilla o cuerpo extraño en los ojos.
- Boca seca (xerostomía): Dificultad para tragar, hablar, masticar alimentos secos, cambios en el gusto, aumento de caries e infecciones bucales.
- Fatiga.
- Dolor articular y muscular.
- Piel seca y sarpullidos.
- Sequedad vaginal.
- Tos seca persistente.
- Fenómeno de Raynaud (cambio de color en manos o pies con el frío).
Diagnóstico y Tratamiento:
El diagnóstico puede ser complicado debido a la variedad de síntomas y a que se puede confundir con otras afecciones. Suele requerir una combinación de exámenes físicos, análisis de sangre y, en ocasiones, biopsias de glándulas salivales.
El tratamiento del Síndrome de Sjögren es principalmente sintomático, enfocado en aliviar la sequedad y otras manifestaciones. Puede incluir:
- Para la sequedad: Gotas oftálmicas, lágrimas y saliva artificial, humectantes.
- Medicamentos: Fármacos que estimulan la producción de saliva, antiinflamatorios, inmunosupresores o corticoides para las afectaciones más graves de otros órganos.
- Medidas no farmacológicas: Mantener una buena hidratación, evitar el tabaco y el alcohol, una dieta equilibrada, ejercicio regular y un buen manejo del estrés.