El pasado 5 de octubre la prensa local de León se hacía eco del deplorable estado de las cuentas de ASPACE León con una deuda de 800.000€ y la reclamación de la Gerencia de Servicios Social de realizar una auditoría externa para conocer con exactitud el estado de las cuentas.
Ante esta información el presidente de ASPACE León, Luis Manuel Rodríguez, achaca la situación a unas subidas salariales a las cuales estaban obligadas por ley y al volumen de incapacidades temporales que hay en la empresa. Desde el sindicato de enseñanza de CCOO de León consideramos una falta de respeto y una burla hacia el conjunto de la plantilla de ASPACE este tipo de declaraciones, puesto que cargan sobre las espaldas de las personas trabajadoras la responsabilidad y la pésima gestión que ha llevado a cabo la Junta Directiva que él preside.
La atención a las personas usuarias no se puede llevar adelante sin el trabajo diario de todas las personas que ahora están siendo señalas por el presidente de la entidad.
Los delegados y delegadas de CCOO en ASPACE han denunciado en multitud de ocasiones ante la Inspección de Trabajo y el Juzgado de lo Social de León la situación que vive la plantilla. Un ejemplo de esto lo encontramos en los constantes cambios en los cuadrantes que impiden conciliar la vida personal y familiar -llegando a tener varios cuadrantes diferente en la misma semana- o en el incumplimiento de sentencias sobre la administración de alimentación por sondas por parte de personal no cualificado para esta tarea. Desde CCOO lamentan que el presidente de la entidad no haya tenido la misma rapidez en solucionar estos problemas que en culpar de la situación a la plantilla.
En los últimos 8 años hasta un total de 7 gerentes han pasado por ASPACE. Esto es una clara muestra de la inestabilidad y de la falta de proyecto ya que, si bien muchos y muchas se han ido ante la imposibilidad de llevar a cabo las tareas para las que fueron contratados, otros han sido despedidos por parte de la Junta Directa. Precisamente, ha sido en estos 8 años donde se ha ido fraguando esta deuda que ahora presentan.
Cuando el presidente de la entidad hace referencia a las situaciones de incapacidad temporal no entra en el fondo de la situación ni por qué se producen. Obvia, intencionadamente, que estas bajas no son cubiertas con nuevo personal, provocando una sobrecarga sobre el personal que se mantiene trabajando, llevando a este personal a una situación límite y provocando nuevas situaciones de incapacidad temporal.
Por si este ataque a las personas trabajadoras fuera insuficiente, el señor Rodríguez sigue cargando hacia un colectivo que ha tenido el salario congelado durante años y que ha logrado conseguir un incremento desbloqueando esta situación mediante un conflicto colectivo interpuesto ante la Audiencia Nacional por el sindicato CCOO.
Del mismo modo, desde el sindicato de enseñanza de CCOO de León recriminan también las declaraciones del gerente de servicios sociales de León, José Antonio Orozco, en las que alega que no dejarán solas a las familias ni a los usuarios, pero donde no dirige ninguna de sus palabras hacia los trabajadores y las trabajadoras de ASPACE. En los 8 años que lleva presentándose el problema la Consejería ha estado mirando para otro lado para ahora solicitar una auditoría que va a quedar en papel mojando dejando al mando a las mismas personas que han originado a situación.
Por todo ello, desde CCOO muestra su rechazo a su ofrecimiento de mantener la actual junta directiva de ASPACE, puesto que esta es la verdadera culpable de la desastrosa situación en la que se encuentra la entidad.
Piden que sean los responsables de esta situación, de la inestabilidad generada por la Junta Directiva y la dirección de la entidad, quienes asuman las consecuencias de la nefasta gestión y se deje de culpabilizar a las únicas personan que están haciendo que ASPACE León siga dando la mejor atención posible a las personas usuarias. Porque no tienen dudas que, sin el compromiso, la profesionalidad y el saber hacer de las personas trabajadoras de ASPACE la situación que ahora mismo viven sería infinitamente peor.
