
La Junta de Castilla y León ha valorado de forma positiva la evolución favorable de los incendios forestales que afectan a distintas provincias de la Comunidad. Tras la reunión celebrada ayer por el CECOPIA, se informó de que varios fuegos han reducido su Índice de Gravedad Potencial (IGR), lo que permite rebajar la presión sobre el operativo de extinción.
En la actualidad, seis incendios permanecen en nivel 2, después de que cinco de ellos descendieran de categoría en las últimas horas. Además, el incendio de Canalejas baja a nivel 0, al no presentar reproducciones.
Entre los fuegos que han reducido su IGR de 2 a 1 se encuentran los de Llamas de Cabrera, Anllares y Gestoso-Oencia, así como el de Barniedo de la Reina-Cardaño de Arriba, que afecta a León y Palencia. Todos estos se mantienen sin llama activa, sin riesgo para la población y sin cortes en la red viaria, aunque continúan bajo vigilancia y con labores de enfriamiento.
Asimismo, el incendio de Fasgar-Colinas del Campo de Martín Moro Toledano ha sido unificado bajo una única dirección técnica para optimizar su gestión, mientras que el fuego de Porto-La Baña, que se extiende entre León y Zamora, sigue en IGR 2 por el riesgo que aún persiste en la zona de La Baña.
Durante la jornada de ayer se registraron dos nuevos incendios en Garaño y Molinaseca (León). Ambos fueron clasificados inicialmente como IGR 2, aunque el de Molinaseca ya muestra una evolución favorable. Ninguno de ellos tiene confirmado un origen natural.
Con este avance, la Junta subraya que, aunque la situación mejora, la vigilancia y coordinación entre provincias continúan siendo esenciales para evitar reproducciones y asegurar el control definitivo de los incendios.