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Con motivo del Día Mundial contra la trata de personas, que se conmemora cada 30 de julio, Accem, entidad con larga experiencia en el trabajo con víctimas de estos delitos, advierte del crecimiento de casos que tienen como finalidad la explotación laboral, pese a que el imaginario colectivo alrededor de este fenómeno lo vincule más con la explotación sexual. De hecho, tanto el Grupo de Expertos del Consejo de Europa en la Lucha contra la Trata de Personas (GRETA, por sus siglas en inglés), del Consejo de Europa, como el Departamento de Estado de Estados Unidos advierten de que estos casos están infradectados.
Por otra parte, la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), avisa de que se ha detectado un aumento en el número de hombres y niños, respecto a la década anterior, que han sido víctimas de trata, aunque apunta que 6 de cada 10 casos corresponden a mujeres. En su informe, el organismo insiste en la vulnerabilidad que conlleva ser víctima de una guerra, y prevé un aumento de los casos de mujeres ucranianas, debido al conflicto derivado de la invasión rusa en febrero de 2022, pues ya se dio en 2014 cuando comenzó la guerra de Crimea. También advierte de que las principales víctimas de trata son mujeres que escapan de conflictos, principalmente de África y Oriente Próximo.
Aumenta la detección de casos
A nivel estatal, según los datos publicados por el CITCO (Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado), España registró en 2022 un total de 229 casos de trata de personas, de los cuales 129 con fines de explotación sexual (120 mujeres, 4 niñas y 5 hombres) y 89 relativos a la explotación laboral (67 hombres, 3 niños, 18 mujeres y una niña). De estos últimos, es reseñable que se concentran mayoritariamente en tres a utonomías: Región de Murcia (27), Castilla-La Mancha (26) y Andalucía (17). También se detectaron 2 casos de matrimonios forzados y 9 de trata con fines de criminalidad forzada.
Mayoritariamente, los países de origen de las víctimas de trata con fines de explotación sexual en 2022 fueron Colombia (37), Paraguay (19) y Venezuela (16), mientras que, en relación con la explotación laboral, fueron Marruecos (28), Ucrania (9) y Rumanía (8), siendo los sectores textil, agrícola, minorista, industrial, construcción, restauración, belleza, trabajo doméstico y en centros de cuidado de personas de la tercera edad donde se producen, según el informe del Departamento de Estado de EE.UU.
En comparación con años anteriores, las cifras del año pasado visibilizan un aumento en la detección de casos, pues en 2021 se contabilizaron 189 casos (136 con fines de explotación sexual, 51 laboral y 2 relacionados con matrimonios forzados). Este incremento de los casos corresponde con el fin de las restricciones de la pandemia de Covid-19. De hecho, el organismo de la ONU señala que se ha producido una disminución a nivel mundial de los casos detectados de trata de personas debido a las restricciones que se impusieron a causa de la Covid-19, que empujó aún más a la clandestinidad a estas actividades delictivas, limitando la posibilidad de respuesta de los Estados para identificar a las víctimas y poder hacer frente a los tratantes.
En cuanto cifras a nivel europeo, los casos de delitos de trata de personas con fines de explotación laboral o sexual crecen en la Unión Europea, según los últimos datos disponibles, relativos a 2021. Concretamente, ese año se contabilizaron 7.155, una subida del 10% en comparación con 2020 (6.534). En 2019 se registraron 7.777 casos. Hay que tener en cuenta que las restricciones derivadas de la pandemia provocaron un descenso de los casos registrados.
Sobre Accem
Accem es una ONG sin ánimo de lucro, apartidista y aconfesional que trabaja para mejorar las condiciones de vida de las personas en situación de vulnerabilidad y con más de 30 años de experiencia en la acogida de personas refugiadas y solicitantes de protección en España. Entre sus programas, destaca uno, ubicado en Cartagena, de atención y acompañamiento a mujeres víctimas de trata y otras formas de violencia. Esta línea de trabajo surge de la observación de algunos casos de mujeres han expuesto diversas situaciones que deben tener un adecuado seguimiento, con el fin de identificar posibles violencias, explotación y/o trata de personas.
A nivel ciudadano, desde Accem se insiste, como formas de atajar este fenómeno, en sensibilizar a la sociedad para que sea más crítica con lo que consume y lo que compra y que reclame a los representantes derechos iguales para todas las víctimas de estos delitos. Además, en caso de tener conocimiento de algún caso, se sugiere que, de poder hacerlo, se recomiende a la posible víctima que acuda a entidades expertas o a las autoridades pertinentes.
