Ahora León / Receta de croquetas / Alicia Malicia
Hoy celebramos el día internacional de las croquetas y que mejor manera de hacerlo que con uno de los productos más emblemáticos de León que es la cecina de vacuno, que por la intensidad de sabor de ambas, hacen la pareja ideal con los boletus. ¿Te atreves a probar esta receta? Deleita tu paladar con estas cremosas y deliciosas croquetas
Tiempo de elaboración: 45 minutos Dificultad: Media-Baja
Ingredientes para 8 raciones:
270gr de mantequilla
270gr de harina de trigo
1,50L de leche entera
400ml de caldo de cecina o jugo de carne
300gr de boletus
200gr de cecina de vacuno leonés
C/S Sal fina
Para el rebozado:
6 huevos
500gr de pan rallado
Aceite para la fritura
En primer lugar pondremos la mantequilla a fundir en una sartén o un cazo antiadherente a fuego muy bajo. Una vez la mantequilla esté fundida añadiremos la harina y rehogaremos la mezcla durante unos minutos mientras removemos con una varilla, hasta que vaya adquiriendo un color más tostado (Este paso es clave para que la masa no sepa demasiado a harina al finalizar la receta).
Cortaremos en tacos finos la cecina y en dados de aproximadamente un centímetro los boletus.
Añadimos los boletus y la cecina a la mezcla de harina y mantequilla y mezclamos bien.
Echamos la leche y el caldo también en la sartén, subimos el fuego y removemos cuidadosamente hasta que suba la temperatura y empiece a espesar.
Añadimos la sal.
Una vez la masa empiece a coger textura, volveremos a poner el fuego al mínimo y seguiremos removiendo, pasando la varilla por todos los bordes para que la masa no se agarre al fondo. Cuando la masa esté hirviendo debemos seguir trabajándola durante unos 20 minutos a fuego muy lento. (Cuanto más tiempo le dediquemos a remover bien la masa más cremosa será la textura de nuestras croquetas.)
Cuando la masa esté lista, la verteremos en una bandeja para dejarla enfriar unas horas.
Después podremos dar forma y empanar nuestras croquetas.
Para un exterior más crujiente sustituiremos la harina del empanado clásico por otra capa de pan rallado.
Es decir, las pasamos por una capa de pan rallado y las damos forma, a continuación por huevo batido y por último pan rallado de nuevo.
Ya tenemos nuestras croquetas listas para freír. Para la fritura pondremos aceite abundante en una sartén honda o un cazo (suficiente aceite como para cubrir las croquetas.) Calentamos el aceite a unos 180 grados y freímos las croquetas hasta que se ponga de un color dorado.
Las ponemos sobre papel absorbente para quitar el exceso de aceite y ¡listas para disfrutar!