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En el Ayuntamiento de Valencia de Don Juan las quejas recibidas en la Concejalía de Medio Ambiente y en la Línea Verde en relación a comportamientos incívicos de algunos propietarios de perros son constantes y con el paso del tiempo cada vez se han incrementado más.
El problema, obviamente, no son los perros sino los propietarios que no recogen los excrementos que sus animales dejan en los parques y vías públicas de la localidad, a los cuales desde la Concejalía de Medio Ambiente se les recuerda que el articulo 12 punto 9 de la Ordenanza municipal reguladora de la protección y tenencia de los animales de compañía establece que “las personas que acompañen a perros u otros animales de compañía por la vía pública, evitarán que estos depositen sus deyecciones en aceras, paseos, parques, jardines o cualquier lugar de tránsito de peatones».
Es por ello por lo que el Ayuntamiento ha emprendido acciones en varios sentidos, siendo una de ellas la colocación de nuevas papeleras en determinadas zonas de la localidad que carecían de ellas y que cuentan con un tránsito habitual de dueños con sus mascotas y otra la instalación de carteles informativos en las zonas verdes de la localidad advirtiendo de esta obligación.
Desde la Concejalía advierten que el no cumplimento de esta obligación establecida en la Ordenanza está considerado como infracción leve y conllevará una multa entre 30 y 300 euros.
Los excrementos no solo deslucen calles y jardines de la localidad, sino que también son un problema sanitario como explican desde la Concejalía, ya que estos excrementos pueden trasmitir enfermedades entre perros y de perros a personas, siendo el parvovirus una de las más graves, concluyen desde la Concejalía.
