Los datos del paro correspondientes el mes de septiembre conocidos esta mañana continúan con la tendencia negativa en la provincia de León y es que se ha incrementado en 168 (+0.81%) el número de personas desempleadas en el mes de septiembre y son un total de 20.910 las que se encuentran en situación de desempleo. Si tenemos en cuenta el mismo periodo del año anterior, son 613 personas menos
(-2.85%) en las listas de desempleo.
Pese a que la práctica totalidad de los sectores de actividad registran un descenso en el número de parados, no es suficiente para contrarrestar el fuerte aumento del paro en el sector servicios (+289), siendo el sector más volátil en cuanto al empleo se refiere.
En lo que respecta a afiliación, los datos tampoco son positivos en la provincia. Tras meses ganando afiliados, la provincia pierde 911 en el último mes (-0.54%) sumando un total de 169.426 afiliaciones en septiembre.
La Federación Leonesa de Empresarios (FELE) considera que la pérdida de afiliados registrada en el último mes debe interpretarse como una señal de advertencia para frenar la implementación de nuevas medidas que dificulten la creación de empleo. Asimismo, insiste en que la inseguridad jurídica y los acuerdos políticos alejados de los intereses nacionales están contribuyendo a esta tendencia negativa en los datos de empleo. Por ello, considera urgente revertirla y avanzar hacia un entorno de estabilidad que favorezca el crecimiento económico a largo plazo.
FELE subraya la necesidad de recuperar un clima de confianza, previsibilidad y seguridad jurídica que incentive la inversión y la creación de empleo. Destaca la importancia de respetar la autonomía de los sectores productivos mediante la negociación colectiva, en lugar de imponer decisiones gubernamentales, como ha sucedido en el reciente debate sobre la reducción de la jornada laboral. La federación insiste en la necesidad de alcanzar consensos que involucren a todos los actores y que otorguen la flexibilidad necesaria para adaptarse a cada situación sin generar perjuicios y sobrecostes, principalmente a las pequeñas empresas.
Asimismo, FELE reclama reducción normativa y fiscal, así como un mayor control del absentismo para garantizar la competitividad y la creación de empleo. Las empresas están sometidas a un exceso de regulación, con un promedio de dos nuevas normativas diarias, lo que dificulta su operativa. Además, España se encuentra entre los países de Europa con mayor carga impositiva, lo que agrava la situación de las compañías.
En relación al absentismo laboral, FELE destaca que la provincia de León ocupa una de las primeras posiciones a nivel nacional en cuanto a la duración de las bajas laborales, lo que representa un desafío adicional para las compañías de la provincia.
Por último, y ante el grave problema que supone la falta de mano de obra cualificada para muchas compañías leonesas, FELE insiste en poner el foco en la formación aumentando el número de plazas en Formación Profesional como medida para crear mas puestos de trabajo acordes a las verdaderas necesidades del mercado laboral
