La madre, R.C.R se ha dirigido a la redacción de Ahora Léón, nos ha hecho llegar una copia de la denuncia y un articulo de opinión en el se puede ver y sentir su impotencia y deseos de acabar con esta lacra que cada vez afecta a más jovenes.
«La gran frase del incompetente, son cosas de niños, la ideada por el mal formador, educador o monitor, son cosas de niños!!!, pues NO querido responsable, gerente o formador de la empresa deportiva encargada del Campus de futbol en Carbajal, no son hechos menores, ni meras travesuras de niños, es un hecho delictivo tal y como se indica en la denuncia que acompaño a este escrito, además de vuestra no asunción de responsabilidades y vuestra nefasta gestión de la situación que unida a la falta de comunicación a los padres constituyen delito recogido en la Ley de Enjuiciamiento Criminal en su anexo 1 y en la Ley 4/2015 del Estatuto de la Victima, en su anexo 1, y de la que esperamos como padres que se os aplica la máxima pena disponible porque no, no se trata de un instante que pasa y se desvanece en el tiempo sin más, se trata de un suceso que puede acarrear graves consecuencias en la vida de un ser humano en su infancia y posiblemente en su edad adulta, ¿lo entendéis?, Seguro que no por vuestra falta de empatía y profesionalidad a pesar de divulgaros como empresa conformada por personal cualificado y con gran experiencia en vuestra presentación…auténtico humo y como te dije señor responsable, formador o gerente, ya que defendías ese estatus en tu argumentación, un verdadero profesional le hubiera dado el lugar y el tiempo al suceso, hubiera intervenido y actuado y por supuesto hubiera informado a todas las partes y empatizado con la víctima en lugar de la defensa absurda de tus años de experiencia y de la versión cerrada del niño que, por cierto, corroboró tu gran profesional de monitor, en una conversación que más aún me aclaro la incompetencia de tu personal.
Voy a relatar los hechos denunciados para que socialmente se te explique que NO, NO SON COSAS DE NIÑOS, ninguna vejación ni humillación a nadie y mucho menos a un menor que no dispone de recursos para afrontar semejante situación y, que se vio desamparado, sometido a la burla de sus propios monitores y en la mayor soledad que un ser humano con 8 años, si 8 años se puede ver…
Viernes 9 de agosto, finaliza el campus de futbol en Carbajal, al que ha estado acudiendo esta semana mi pequeño. Después de comer nos vamos a pasar una agradable tarde en compañía de sus tíos espectaculares, el peque está relajado, y de repente nos cuenta que en el campus ha habido niños que se han estado metiendo con él, que le sacaban el dedo y le insultaban, y
–qué hacías cariño…metía debajo del agua la cabeza para no oírles, para no verles …, por dios nos partió el alma, ¿nadie se da cuenta?, en serio…los monitores,¿ dónde están?…bueno mami lo que más me molestó es que me metieran el dedo en el culo, dos veces M y R, dos niños del campus que además eran los mismos que llevaron a cabo el bullying narrado, -cariño por dios, cómo no me lo dijiste?- Fue hoy mami, bueno y otro día fue el otro niño, pero y qué hiciste, por qué no se lo dijiste a los monitores, -mami lo hice, se lo dije, y – ¿qué paso amor, se rieron…y después les sacó de la piscina y les castigo, bueno yo también tuve que salir de la piscina…fin.
Recojo a mi peque a las tres, nadie me comunica absolutamente nada del suceso ni a mi ni sobreentiendo a los papas de los niños que cometen esta vejación…el hecho es lo suficientemente grave como para informar a las familias, es más, en nuestro caso deberían de habernos llamado inmediatamente para asistir a nuestro hijo y que no sintiera la indefensión a la que estos ineptos le sometieron, si señores, indefensión porque es un niño, y como tal, no dispone de los recursos necesarios para sentir la protección y el cariño ante semejante vejación, si además le añadimos la burla de los que deberían haberle asistido se convierte en un hecho, no sólo denunciable, sino y sobre todo deleznable. ¿En serio ese castigo? en serio creéis que vuestra reacción es la esperada de un formador/monitor cualificado?, vuestra reacción es la propia del incompetente y no cualificado, peor aún, sin ningún tipo de empatía hacia el menor. A pesar de la gravedad, la situación se aborda desde la información y la educación, el hecho debía ser comunicado a todas las partes, a nosotros para asistir y arropar a nuestro hijo y a los otros padres para poder intervenir en la conducta de sus hijos, dándoles la opción de frenarla a través de la reeducación. Dudo mucho que los padres de esos niños les agrade no ser conscientes de este suceso porque es una conducta no solo delictiva sino inapropiada y que debe reconducirse.
El problema!, el problema radica en vuestras frases son cosas de niños que dejan de serlo cuando os pongo el símil de ser yo misma quien os meta el dedo en el culo a cada uno de vosotros para que podáis experimentar como adultos la vejación y la humillación que sufrió mi hijo, ¿no es viable verdad? Y ¿por qué?, porque no está bien que una mamá le meta el dedo por el culo a un formador, a un monitor, no está bien, es una humillación es una vejación, no os gustó verdad que os pusiera en esa tesitura, que sólo os mostrara el ejemplo, imaginaros vivirlo en vuestra propia carne, en la de vuestros hijos, hermanos, primos…ausencia de empatía, no es comparable¿ verdad? no os toca no sois vosotros, SON COSAS DE NIÑOS, estaban jugando…pero si es de adulto a adulto, ya no verdad?, pues es muchísimo peor a un niño, el grado de humillación triplicarlo en un niño, no tiene recursos para afrontar tal situación. Y todavía el monitor me dice si después del comedor estuvo jugando con ellos, te lo explico, veo que necesitas una explicación a un monitor cualificado y formado, pues este aprendizaje es de nivel básico en cualquier formación, la victima busca la aceptación del grupo para que no sigan sometiéndole o abusando del, ¿lo entiendes monitor cualificado?
Escuchar a estas dos personas no hizo más que demostrarme sin necesitarlo el horror vivido por mi peque que deseo y espero que con la ayuda necesaria no se convierta en un trauma infantil que arrastre de por vida y que condicione la misma, si señores, es así, podéis con vuestra incompetencia, falta de profesionalidad, ausencia de empatía joderle la vida a un niño…y esto cualquier psicólogo os lo puedo explicar, o el mismo profesional que hoy recogió nuestra denuncia y que nos expresó la cantidad de menores que han vivido momentos similares que han marcado negativamente su vida.
¿Objetivo? que no vuelva a suceder, que los padres de los otros menores sean informados para que puedan actuar, que el personal no cualificado como han demostrado este señor y sus monitores sean apartados de cualquier trato con niños y por supuesto lo que la ley decida aplicarles.
Y por favor, borremos esa maldita y absurda frase SON COSAS DE NIÑOS porque no lo son, si como adultos no las aceptaríamos que tenemos recursos para gestionarlas, como menores son inadmisibles».
