Noticias de León / Ahora León / Ademar Kadetten / Foto: S. Arén / P. Blanco
El Abanca Ademar volvía a jugar en León, pero esta vez con el Kadetten Schaffhausen en la segunda jornada de la fase de grupos de la EHF Champions League.
Los de Guijosa debían emplearse a fondo en el Palacio de los Deportes ganar a los suizos que habían logrado ganar varios partidos antes de enfrentarse a los leoneses.
Tras un inicio en el que los leoneses parecían dominar el encuentro y con un Vieyra que acaparaba el mayor número de lanzamientos en ataque, el Kadetten no se quedó atrás en el marcador aunque siempre por detrás.
Con el 7-5 en el minuto 13 de juego, Cupara estaba siendo un muro para los visitantes permitiendo a los suyos abrir una pequeña ventaja en los siguientes compases del enfrentamiento.
Los Suizos se fueron metiendo en el partido en la recta final del primer tiempo debido a varias imprecisiones de los locales que fueron bien aprovechadas por estos a la contra. Del 10-10 se pasó al 12-10, tomando como arma principal al gigantón de Pesic, que se hacía en cada ataque blanco con la posición al borde del área.
La defensa alta de Norouzinezhad obligaba al Ademar a introducir balones en esta zona y gracias a la habilidad en tareas de finalización los locales pudieron seguir sumando poco a poco.
El Ademar se fue al descanso con un 14-13 a su favor
La charla técnica de Guijosa en el descanso resulto ser mucho más efectiva que la de Kukucka, ya que en tan solo 3 minutos los ademaristas se fueron a los 18 puntos, una ventaja que obligó a los suizos a parar el partido con un tiempo muerto.
A partir de este momento el ataque se complicó para los locales, pero el extraordinario Cupara seguía desbaratando todas las ocasiones suizas, permitiendo al Ademar mantener una ventaja de 3 goles (20-17 en el minuto 10 de partido).
Csaszar estaba siendo el hombre que atraía el peligro a la zaga blanca, pero el bloque defensivo ademarista, como de costumbre estaba haciendo un trabajo fantástico, dejando muy pocos huecos que a veces aprovechaba el pequeño de Liniger para aumentar su cuenta particular.
Poco a poco los minutos iban pasando y la tensión aumentaba ya que los suizos se acercaban en el marcador, pero los ademaristas supieron aguantar la ventaja que poseían para acabar ganando por tan solo un gol de diferencia, 29-28.
Victoria por la mínima que vale para sumar los primeros puntos en esta fase de grupos de la máxima competición europea.
