319 litros por segundo se pierden en León a través de los túneles de la variante, “caudal suficiente para abastecer a una ciudad mediana, mientras algunas zonas de León tienen problemas de abastecimiento de agua potable en verano”, explica, desde Izquierda Unida, Carmen Franganillo, coordinadora local de la organización.
Promesas que no se cumplen:
Varios años después de que la Federación Leonesa de Entidades Locales Menores, junto con la Asocación Lacerta, denunciase el severo impacto medioambiental que la Variante de Pajares genera en el sistema hídrico de la provincia de León y varios meses después de la resolución que obligaba a Adif a resarcir a León por el trasvase de agua de la cuenca leonesa a Asturias, se desconoce el estado de implementación de las medidas necesarias para corregir el desastre producido.
Entre las medidas que se estimaron entonces como necesarias estaba el sellado de las fracturas y las fugas, la elaboración de un proyecto de restauración y corrección integral de los efectos causados sobre los manantiales y las masas de agua superficial, además del diseño de un proyecto de restauración de los hábitats y especies de la zona, que cuenta con el amparo de la Red Natura 2000. El coste estimado de las infraestructuras necesarias es de 30 millones de euros, más el mantenimiento de los mismos, de unos tres millones al año, “que debe ser también presupuestado”, nada comparado con los 4000 que ha costado la construcción de la infraestructura ferroviaria.
Las medidas correctoras propuestas “tienen en cuenta la actividad económica de la zona que se ha visto perjudicada por la falta de abastecimiento de agua; una zona especialmente castigada, además, por una transición ecológica desordenada y que ya repercutió en su momento, especialmente en algunas de las zonas afectadas por la cuestión del agua.”, exponen desde IU. Pero,” hasta el momento, esas propuestas no se han llevado a cabo”, expone Franganillo.
Estas medidas recogidas en la resolución suponen también “la recuperación y adecuación de las captaciones de agua para abastecimiento de la población, como las fuentes públicas, o los abrevaderos para el ganado y las captaciones de agua para el regadío, así como la recuperación de las superficies y la calidad de los pastizales para el ganado”.
Desde IU consideran que “la obra de la variante de Pajares, aunque necesaria, ha supuesto millones de euros invertidos, del Erario Público, años de retrasos y el caos ambiental en la zona”. Para finalizar, desde la organización piden que “se dé una solución integral a los vecinos de los pueblos leoneses de Pajares y al problema causado en los acuíferos”.