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Exitoso estreno de la séptima edición de Riaño Trail Run. La prueba organizada por TerraIncognita Sport celebró este viernes la primera de sus etapas y lo ha hecho por todo lo alto, con un alto nivel de los participantes gracias a la climatología y disfrutando de un recorrido salvaje de 36 kilómetros que unía la localidad de Oseja de Sajambre y el pueblo de Caín de Valdeón, una meta muy especial en un lugar emblemático para todos los montañeros por ser uno de los extremos de la Ruta del Cares.
En los primeros compases esta etapa inicial asciende hacia Vegabaño y pasa por Soto de Sajambre; desde allí se conecta con la cimera del Frade, Vega de Llós y se desciende por el bosque de la Farfada hacia Cordiñanes para alcanzar el famoso mirador del Tombo. Ya con los inconfundibles perfiles de los Picos de Europa frente a ellos, los corredores subieron por el canal de Capozo y afrontaron el posterior descenso por Mesones hasta llegar a Caín. En total, los participantes han salvado hoy un desnivel acumulado de 6.000 metros.
A sabiendas de la necesidad de gestionar la energía para afrontar las dos etapas restantes, los corredores han dosificado esfuerzos alcanzando la línea de meta dentro del tiempo exigido: 10 horas. El más rápido en hacerlo en categoría individual ha sido el manchego Jesús Gil en 4h 12:48, seguido del vasco Julen Fernández (4h 16:10) y del vencedor de la pasada edición, Fran Estévez (4h 27:59). En el cuadro femenino Eugenia Gil ha logrado un colchón de tiempo considerable para postularse como gran favorita a la victoria final. Con un crono de 6h 05:33 ha superado a María Herrera (6h 36:59) y a la portuguesa Margarida Bragao (6h 55:15).
Por equipos, el Team Fénix ha sido el más rápido en meta con un tiempo de 5h 27:04 en la categoría masculina, mientras que en la mixta el Pozik-Dateunvoltio ha marcado el mejor crono con 5h 17:43.
Ya de vuelta en Riaño los participantes disfrutaron de una merecida ducha y comieron en abundancia para recuperar calorías y afrontar la etapa del sábado. Esperan 21 kilómetros y 1.824 metros de desnivel positivo en un trazado donde se corona el pico Espigüete, una de las cumbres más carismáticas de la zona. Además, al cajón de salida se unirán también los corredores inscritos a la modalidad 2xTrail.
Hasta la caída del sol, participantes y acompañantes compartieron momentos en el Riaño Camp, uno de los grandes alicientes de este evento que fomenta la convivencia y ayuda a estrechar relaciones con otros deportistas.
