Periódico de León / Opinión / Anónimo
¿Se puede malversar un Parlamento entero en un país (España) con millones de ciudadanos abandonados en su miseria?
¿Se puede en un Parlamento ser básica y mayoritariamente consumidores esenciales de ocio y cobrando por ello mientras las urgencias del país y de los ciudadanos esperan sine die soluciones colgadas en el tiempo?
¿Se puede dedicar un Parlamento (el español) a juegos florales con ideologías snob poniendo espadas sobre las cabezas de los ciudadanos si no piensan, sienten y quieren lo que unos pocos les exigen, les imponen y les amenazan? Esto es lo que hoy sucede. ¿Cómo puede nuestro Parlamento dedicar (perder) un solo minuto en considerar si admiten a trámite la ley mordaza –mucho más mordaza que la ya recortada a propuesta del partido Podemos -; y ahora ellos presentan otra mordaza mucho, infinitamente peor?
¿Puede el Parlamento español tener absolutamente abandonado el tema pensiones, el tema familia, el tema justicia, el tema educación, el tema desigualdades entre regiones (autonomías), etc. etc. y dedicarse a complacer al colectivo LGTBI, de la mano de Podemos, en su exigencia de recortar libertades, confundir a los niños y amenazar al 90% de la ciudadanía?
¿Puede el Parlamento engañar al pueblo español con propuestas que titulan con nombres compasivos pero tienen contenidos semi-criminales (como es la presentada por Podemos) y que está siendo tramitada como si fuese la mayor urgencia del país?… Porque semi-criminal es su planteamiento para confundir, desorientar, desequilibrar, y deseducar a niños desde infantil y a lo largo de toda la escolaridad. A niños necesitados de seguridad, de estabilidad, de certezas, de autoconocimiento, de afirmación y no de inseguridades, de confusión, de dudas y de veleidades, que es lo que pretende (por ley) llevar a la escuela el colectivo que se autonomina como educador por antonomasia con titulación propia en su particular facultad de la experiencia obtenida en una semana de orgullo.
¿Es esta la prioridad del pueblo español? ¿Cuántos padres/madres de familia quieren para sus hijos la suerte que el Parlamento trata de darles?
¿Es siquiera aceptable que tantísimas personas como forman al Parlamento dediquen un solo minuto de tiempo parlamentario a plantear una ley que el 90% de ellos ni siquiera han leído? Porque es imposible, desde el menor sentido común, que habiendo leído ese proyecto de ley, se le dé un minuto de aceptación. A menos que …
¿Cuántos de los pasados votantes de Podemos (porque ahora son ya muchos menos), quieren para sus hijos el tipo de educación que dicha ley pretende? ¿Y cuántos de los parlamentarios lo quieren para sus hijos? Naturalmente de los que tienen hijos pequeños, pues… ya sabemos que los demás están ahí para el aplauso, el follón, el folklore, el consumo de ocio y esperar la paga del mes -a costa de los españolitos de siempre -.
Que no se ofendan sus señorías; eso es lo que el pueblo ve, lo que conoce, lo que le muestran y entiende sobre el Parlamento y sus ocupantes.
Lo cierto es que lo importante, los problemas del país, las necesidades del pueblo, las urgencias, lo que cuenta y vale sigue esperando o sigue perdido bajo los escaños en los que sientan sus posaderas tanto parlamentario ocioso y divertido.
¿Podríamos saber, el pueblo ignorante y sufriente, cuál es el criterio de urgencia, necesidad, igualdad, equidad, bien común, interés general y justicia que sigue el Parlamento para plantear leyes y su tratamiento? ¿Dónde está un gobierno y su partido que marque prioridades?
Sabemos que el lobby LGTBI dispone de muchísimo dinero de subvenciones y de mecenazgos. ¿En qué medida el dinero presiona al Parlamento para priorizar y acaso para aprobar…?
Claro, el tema pensiones no tiene mecenas. ¿Llegará alguna vez al Parlamento? Las familias, que son el mayor bien que posee el Estado, no tienen mecenas ni subvenciones, ¿interesan al Parlamento? ¿Para cuándo una ley de compatibilidad? Los niños la necesitan infinitamente más que lo que el Proyecto que comentamos les va a imponer, es decir, lo que Podemos -al servicio del lobby LGTBI – les impondrá con mordaza.
¿Por qué los lobbies tienen tanta preferencia sobre los niños en esta España parlamentaria? ¿A quién y a cuántos representan, obedecen o lamen?
Chesterfield decía que “el hombre odia a quien le hace sentir su propia inferioridad ”. Y Montesquieu lo refuerza al decir:”Cuando uno busca tan extremadamente hacerse temer, encuentra antes siempre el medio de hacerse odiar”. ¿Es eso lo que buscan el lobby y Podemos?
El partido Podemos debería escuchar a Lacordaire (aunque no sea de su cuerda): “El despotismo nunca ha salvado nada”. Y, Don “fotos-palabrería” también debería atender a pensadores que nos precedieron y así podría él pensar algo, por una vez. Le dejamos para ello, solo 3 segundos con Unamuno: “Lo sabe todo, absolutamente todo; figúrense lo tonto que será”.
Exigimos al Parlamento que legisle por el bien de TODOS los españoles.
